30 octubre, 2015

El autobús comienza a arrebatar en Europa hasta el 20% de los pasajeros del tren


               _____Por Joris d'Inca y Jean Pierre Cresci _____
             Socios Oliver Wyman on Transportation & Logistics
               publicado en Forbes Logistics & Transportation


Los pasajeros suben a un autobús de la compañía de autobuses británica Megabus en la estación de autobuses de Toulouse, sur de Francia el 10 de septiembre de 2015. A principios de marzo, la compañía británica Megabus lanzó su primera línea de bus interno entre París y Toulouse, con tarifas a partir de € 1 . AFP PHOTO / REMY GABALDA (Photo credit should read REMY GABALDA / AFP / Getty Images)
Después de la desregulación generalizada de los mercados para los autobuses interurbanos en la Europa continental, una nueva clase de competidores de bajo coste está presionando a la empresa ferroviaria tradicional.

Algunos operadores de autobuses interurbanos de bajo coste ofertan precios en rutas muy utilizadas por una parte alícuota de los precios del tren y empiezan a arrebatarle cuota de mercado al ferrocarril.

Ofrecen el mismo o un mayor nivel de comodidad que los trenes de larga distancia y con tácticas agresivas de marketing, una red de rutas inteligentes y grandes aforos, recién llegados del norte de Europa han estado atrayendo hasta un 20 por ciento de los clientes de los ferrocarriles en un corto período de tiempo. Alemania desreguló su industria de autobuses de larga distancia en 2013. Finlandia siguió en 2014, y Francia está desregulando este año.

European Bus vs Rail
Estos ejemplos de la competencia en dos rutas alemanas muestran
la enorme diferencia de precios  entre los servicios de tren y autobús.

Por ejemplo, en la ruta Hamburgo-a-Berlín la compañía ferroviaria alemana Deutsche Bahn ofrece servicio de lunes a viernes cada 30 minutos y el viaje dura 1 hora y 38 minutos. El precio estándar para un billete de ida es EUR78. Una compañía de autobuses interurbanos ofrece un servicio con menor frecuencia, cada 75 minutos, y el viaje dura más tiempo, 3 horas. Pero la tarifa de ida es sólo EUR7. En respuesta, la empresa ferroviaria ofrece algunos servicios muy rebajados a 19 euros, pero aún así, sigue siendo más del doble del precio del billete de autobús. Además, algunas nuevas compañías de autobuses más agresivas están recortando las tarifas aún más bajas en las rutas donde compiten.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Entonces esto no indica que hay una pérdida de viajeros en detrimento del ferrocarril sobre autobús. Si es la tendencia y no se justifica con una deficiencia en el servicio de trenes frente al servicio por carretera, jodido lo tenemos los españoles con el AVE, por muchos que haya. Se convertirá en algo sin servicio, como el aeropuerto de Ciudad Real: los políticos cobran su tanto por ciento por obra (y no por quitar los baches, sino por hacer obra faraónica) los constructores cobran lo suyo y los ciudadanos siguen votando a Barreda y a su partido. Convenzámonos, no se pretende ofrecer un servicio público, se busca justificar un ingreso a las cuentas particulares de los que están en el poder. Esto es una corrupción planificada que más que un oportunismo fortuito.
Los datos son los que son. Las interpretaciones de quien ve los datos pueden vaticinar un futuro tan desesperanzador para el ferrocarril, como el de tantas otras obras millonarias, terminadas o no, que no han llegado nunca a rentabilizarse por los ciudadanos, que se podrían enumerar someramente en este comentario, pero resultaría ya muy cansino.
Los empresarios de los autobuses se frotan las manos: comprarán más autobuses, contratarán más conductores y multiplicarán más sus beneficios. También hay más coches particulares y aplicaciones como bla-bla-car para compartirlos.
Los viajeros sólo cambian de medio de transporte.

Anónimo dijo...

¿Cuántos trenes a estrenar ha comprado Fomento?
¿Cuántos maquinistas hay con habilitación que no ejercen?
¿Cuántas obras de ferrocarril hay inacabadas? ¿Y para cuándo dicen que las terminarán?
Los AVE's ya no son de alta velocidad, sino de velocidad alta. Que es lo mismo que daba un Talgo, sin la inversión millonaria de la nueva vía. Pero eso sí, ahora con WIFI básico.
Y estamos en tiempo de elecciones. Después, si te he visto, no me acuerdo. Si cambia el gobierno, cambiarán los cargos: los antiguos seguirán, cobrando y sin cartera -hasta que le den otro empleo público- los nuevos no sentirán como suyos los proyectos antiguos y decidirán que eso no vale, que hay que hacerlo al revés.
Y así vamos.

Anónimo dijo...

Hay que felicitar a las empresas de autobuses por lo bien que se lo montan con la ayuda del gobierno. Diríase que hay empresarios del transporte por carretera en el consejo administración de Renfe, tal es como están defenestrando el ferrocarril, suprimiendo servicios que no tienen competencia en bus y otras cosas

Anónimo dijo...

Oiga ¿que harán con el personal que no tenga cometido en la empresa ferroviaria?

Anónimo dijo...

Si entran en funcionamiento nuevas operadores de transporte y viven del transporte, pueden ofrecer servicios por ferrocarril, en vez de en bus, o en camión. Salvo, claro está, que exploten las líneas con mayor número de viajeros de AVE, o las líneas de mercancías con mayor volumen. Y esto ya lo hace bien la empresa estatal. Si el gasto por ferrocarril es mayor que el gasto por carretera, convertirán, en el mejor de los casos, la vía férrea en una vía verde, para que circulen los excursionistas en bici. Igual vende los trenes que ya no usan, como chatarra, al chatarrero amigo, en vez de llevarlos a un museo del ferrocarril.