
¿Dónde están, por ejemplo, los sindicatos gemelares llamados de clase, CCOO y UGT? ¿Qué le deben al poder para estar tan calladitos a lo largo de estos dos largos años desde que ocurrió el accidente? Ni un comunicado de prensa, ni una manifestación, ni nada de nada. Callados y ya se sabe, que quien calla otrorga o quien calla consiente, o quien calla, asiente. Y si han dicho algo ha sido de puertas adentro. De los dos partidos políticos mayoritarios, PP y Psoe, ni hablamos. De pena.
Es lamentable que los sindicatos hayan dejado solo al maquinista, salvo el sindicato gremial, cuya reacción tampoco ha sido ni es para echar cohetes. El poder, los poiticastros de la ralea del cantamañanas ex ministro Blanco , de la ministra y las raleas que les acompañan como la Ciaf, Adif, Renfe y demás mamporreros que salen en las televisiones a hablar por la voz de su amo, vendidos por un plato de lentejas, todos le han dejado solo.
Decíamos hace cuatro días que la sombra del poder es alargada. Y tan alargada. Lo cisca todo, lo corrompe todo y a algunos por dos miserables migajas. Da asco.