25 julio, 2019

En homenaje a dos insignes hacendistas

Enrique Fuentes Quintana fué un acreditado hacendista y uno de mis mejores profesores en la Facultad de Ciencias Económicas en la Universidad Complutense durante 1965-1970. Junto con él, destacó el profesor César Albiñana García-Quintana, experto en Derecho Tributario. ( * )

Enrique Fuentes Quintana: el mentor de los Pactos de la Moncloa

En 1956 consigue la cátedra de Economía Política y Hacienda Pública de la Universidad de Valladolid (1956-1958) y posteriormente la cátedra de Hacienda Pública y Derecho Fiscal en la Facultad de Ciencias Políticas, Económicas y Comerciales de la Universidad Complutense de Madrid (1958-1978), también fue catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) (1978-1990) y profesor emérito de esta misma Universidad desde 1990.

Fue también Técnico Comercial del Estado desde 1951, director del Servicio de Estudios del Ministerio de Comercio y de la prestigiosa revista Información Comercial Española de 1958 a 1970. De ahí pasó a ser director del Instituto de Estudios Fiscales y director de Hacienda Pública Española (1970-1978) y otras publicaciones de dicho Instituto.

Fue también Director General de la Fundación Fondo para la Investigación Económica y Social (FIES) de las Cajas de Ahorros Confederadas (1979-1995), y de las revistas Papeles de Economía Española, Perspectivas de Sistema Financiero, Economía de las Comunidades Autónomas y Cuadernos de Información Económica. Fue Presidente de la Fundación Santa María la Real-Centro de Estudios del Románico (1996-2002), tras lo cual pasó a ser Presidente de Honor, cargo que ejerció hasta su fallecimiento.

En junio de 1977 fue designado senador por designación real. Tras las elecciones generales, el 15 de junio de 1977, se constituyó el tercer gobierno de la monarquía, bajo la presidencia de Adolfo Suárez en el que fue nombrado Vicepresidente segundo para Asuntos Económicos, permaneció en el gobierno hasta su dimisión el 23 de febrero de 1978.

Desde su puesto de vicepresidente económico llevó a cabo el Programa de Saneamiento y Reforma Económica acordado por las fuerzas democráticas en los Pactos de la Moncloa así como una profunda reforma fiscal que proporcionó a la Hacienda Española la equidad y la eficacia que el sistema democrático recién estrenado requería y la modernizó con arreglo al modelo dominante en el resto del mundo occidental.

César Albiñana García- Quintana

El otro hacendista   -yo diría más fiscalista que hacendista-  fue César Albiñana García- Quintana. Ha sido un reconocido jurista español en materia de Derecho Financiero y Tributario, con una dilatada carrera profesional y docente a sus espaldas, en la que destaca su participación en los anteproyectos de Ley General Tributaria de 1963 y la Ley General Presupuestaria de 1976, o su intervención en las comisiones preparatorias para la implantación del IVA o la organización del Tribunal de Cuentas.

Inició su carrera en el seno de la Administración Tributaria como inspector de finanzas y de servicios del Ministerio de Hacienda. Posteriormente llegó a ocupar los cargos de secretario general técnico de ese departamento, de director general de inspección financiera tributaria y de director del Instituto de Estudios Fiscales

Su extensa actividad docente se realizó como profesor de Sistema Tributario Español y Comparado en la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Complutense de Madrid, en esta misma universidad impartió la asignatura OCPH (Organización Contabilidad y Procedimientos de la Hacienda y las Empresas Públicas); fue profesor también en la universidad CEU-San Pablo, en CUNEFF y en el Centro de Estudios Bursátiles. En sus últimos años de vida impartió clases de doctorado en la Universidad Pontificia Comillas.
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( * )  Junto a ellos destacaron también otros catedráticos que fueron mis maestros, que hoy podríamos catalogar de "lujo":
José Castañeda Chornet, catedrático de Teoría Económica I y II, el escritor y catedrático de Estructura Económica Mundial José Luis Sampedro; Juan Velarde Fuertes, catedrático de Política Económica de España; Luis Ángel Rojo Duque, Gobernador del Banco de España y catedrático de Teoría Económica III; Gonzalo Arnáiz, catedrático de Métodos Estadísticos; Ángel Alcaide, catedrático de Econometría; Salvador Lissarrague Novoa, catedrático de Principios de Sociología y Métodos Sociales; Ángel Vegas Pérez, catedrático de Matemáticas I y II, etc ....

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es de bien nacido... Hay grandes Maestros en España. Y España va mal. A pesar del talento de los hacendistas, nuestra hacienda no prospera mucho. Será por culpa de los malos gobernantes, los malos estadistas, que no se dejan asesorar por los buenos hacendistas. Las cuentas del Estado son las cuentas de los ciudadanos, que aportan sus ingresos para la hacienda publica y los políticos hacen un uso muy alejado de las necesidades del pueblo. Seguro que los políticos tienen intereses opuestos a los economistas. Hay que atraer inversores y no alejarlos. No se cómo pueden maridar bien los economistas y los políticos. ¿A quién votamos?

Anónimo dijo...

El economista Francisco de la Torre dimite de la dirección de Ciudadanos por discrepancias con Rivera. La apuesta estratégica de Albert Rivera es conquistar al electorado de centro-derecha que proporcionó en el pasado mayorías absolutas al PP y rebasar a la formación de Pablo Casado. De la Torre ha explicado que está "muy harto" tanto de la estrategia política que ha adoptado Ciudadanos como de que se esté "desmantelando el equipo económico" de la formación liberal. El economista considera que "enrocarse en el 'no es no' no es hacer politica".

Francisco de la Torre es inspector de Hacienda en servicios especiales, con lo que volvería a su puesto si deja el Congreso. Además, es un economista de prestigio y fue secretario general y portavoz de la Organización Profesional de Inspectores de Hacienda.

«Lo único que os pido es que midáis a los políticos por lo que hacen, por el ejemplo. Y aunque sea de la extrema derecha, si es un hombre decente y los otros son unos ladrones, votad al de la extrema derecha. Eso me lo manda mi mandamiento interior, mi inteligencia de hombre de izquierdas». «Votad al honrado, al ladrón no lo votéis aunque tenga la hoz y el martillo. Esta es la diferencia de un pueblo inteligente», finalizaba Anguita entre aplausos. Así, de esta forma clara y concisa Anguita fulminaba el argumentario de Pablo Iglesias y Susana Díaz tres años antes de que VOX irrumpiera en la escena política.