08 septiembre, 2012

De la desconfianza al pánico

Malhadados

Por
J. Enrique Villarino


¿A qué espera este burócrata sin idea alguna que nos preside, para pedir de una vez el rescate o lo que sea?, ¿es qué estamos en condiciones de exigir algo a cambio?, ¿es qué no se da cuenta de la situación en que estamos?
Producimos cada vez menos, decrece y mucho nuestro PIB, por tanto no habrá empleo neto y sí más y más desempleo, el déficit público sigue sin control y no vamos a cumplir lo comprometido para este año, cada año crecerá más porque cada vez hay que financiar más gasto social, o dejar de hacerlo, el servicio de la deuda -los intereses- son cada vez más insoportables, el sector financiero está hecho unos zorros, las exportaciones -nuestra salvación-  pierden fuelle, a los bancos no les presta ni diós por las vias convencionales de toda la vida,  la prensa americana ya da fe de la fuga de capitales de los que todavía tienen dinero y mucho en este país a paraisos fiscales, y las clases medias a bancos de Alemania e Inglaterra.

Que no se empeñe este burócrata en pasar a la historia por haber salvado nuestro honor y soberanía. La perdimos en mayo de 2010 cuando otro incompetente no tuvo más remedio que bajar la cerviz y meterse el rabo entre las piernas y decir amén. Es lo que se viene haciendo desde entonces y lo que habrá que seguir haciendo. Ya no hay que salvar honor ni soberanía, sencillamente porque ya no quedan.

Decíamos en 2008 que esta crisis iba para largo y profunda y que si salíamos allá por el 2017-2020, nos podíamos dar con un canto en los dientes. Nuestro diagnóstico ahora es mucho peor y hay muchas crisis por resolver que inciden directamente sobre la económica. Este señor no quiere meter mano a la estructura del Estado que es inviable, a la educación, a tener un nuevo sistema productivo basado en la investigación, la energía barata y la explotación de los recursos del mar, todos ellos sectores punteros y de alto valor expansivo, no quiere oir de meter mano a la corrupción y privilegios de la canalla política, a la que él pertenece. Sólo selimita a apretar las tuercas a los más débiles y hacer que hace.

La situación es crítica. Así no podemos seguir. No se pueden perder ni minutos en no hacer lo que haya que hacer. ¿Va a esperar para decir el sí a que pasen las elecciones gallegas y vascas? Estamos a punto de pasar de la desconfianza en los políticos, los bancos, el sistema financiero, los jueces y demás panoplias, al pánico. Al pánico que nos produce el futuro negro de nuestros hijos y nietos. Malhadado sistema, malhadados políticos, malhadados ladrones banqueros ...


2 comentarios:

Unknown dijo...

Aunque el mejor comentario ya esta dado, que es lo de "SIN COMENTARIOS".
Has dado en el clavo desde 15km de distancia, no se puede decir mas claro, aunque si mas alto, pero los inutiles esos que dicen que gobiernan no lo escucharian, porque no lo diria la Merkel, que es la que de verdad manda en europa.

Anónimo dijo...

Cuanta razón