10 octubre, 2013

Fomento despoja a Renfe de las competencias de seguridad en la circulación y politiza la elección de miembros de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios

Una ex ministra, antecesora de la actual de Fomento, imputada, por cierto, por prevaricación y malversación de fondos públicos decía, a propósito de una nevada de medio pelo, que Barajas era "una cosa mu ..uuuuu grande". Definía así uno de los 47 aeropuertos que tenía bajo su mandato y se quedó tan pancha. Luego, se fue con su corte a Moscú a ver como limpiaban un aeropuerto, al que nada tiene que enviar el nuestro madrileño, según ella, para aprender.


Pues ayer en el pleno del Congreso,  la ministra actual, dedicó buena parte de su contestación a una interpelación urgente de IU, ICV-EUiA, CHA: La Izquierda Plural y demás expresos europeos, a contarnos lo obvio. Como un papá ferroviario le contaría a su hijo antes de acostarse lo que es la Renfe. Que si 14.000 empleados, trabajando día, tarde y noche, velando por todos nosotros, cosa bastante cierta en la mayoría de los casos, pero contado con una carga lacrimógena digna de los seriales de D.Guillermo Sautier Casaseca, excelente serialista español de los años 50 y 60.

Los políticos, como acaban de descubrir una empresa megalómana, tienen cuando se lo cuentan a sus compañeros diputados la tendencia a cierto síndrome de Estocolmo y a contar la versión ingenua que, a propósito, le escriben los viejos zorros ferroviarios para echarse flores por boca de la ministra. Caen estos políticos metidos  a ferroviarios en esa verborrea medio iniciática y masonil de uso bastante extendido en la empresa, lo que les sirve muy bien para tapar sus limitaciones profesionales y de gestión. Todo su discurso fue un parabién jabonoso y pegajosos a los trabajadores, sobre todo de Renfe, al tiempo que para no hablar de otras cosas importantes. Echan minutos y minutos a intentar explicarnos desde lo que es la vía hasta otros berenjenales de mayor calado, de los que luego, no saben salir. Intenta contarnos lo obvio, pero mal. Y lo necesario, no. Haciendo fu como el gato.

Todo esto lo compaginan, aderezado, con una jeta mayúscula. Le preguntan por A, y contesta lo que le da la gana, o nada. Le preguntó la interpelante sobre el no cese o dimisión del presidente de Adif y como si no fuese con ella. Hasta dos veces se lo dijo, pues nada. Ella con sus huerfanitos de la Renfe y que si se invierte mucho en seguridad, porque toda nueva inversión, sea en lo que sea, aumenta la seguridad. Curiosa forma de entender la seguridad. El que se lo escribió, debió decir ¿no quieres hablar de seguridad?, pues toma inversiones en seguridad. Y todo así en este lamentable plan.

Y ahora viene la bofetada a RENFE. Pues que, dejando aparte el lloriqueo para la galería, el relleno de las obviedades que se marcó y la jeta que le echó a sus contestaciones, como no debe fiarse ni medio pelo de los profesionales de RENFE y ADIF, (confundiendo los político-directivos que le cuentan directamente las cosas que es a quienes conoce, con los excelentes profesionales, sabedores de sus profesiones que hacen sus  trabajos de forma excelente) va y les birla todas las competencias en seguridad (sí, sí de esa que estuvo disertando, sin conocimiento de causa durante casi una hora) y las pone bajo la supervisión exclusiva de la Dirección General de Ferrocarriles, a la que despoja de sus otras competencias y a la que dedica exclusivamente a los menesteres de seguridad en la circulación y planificación. Los proyectos, a partir de ahora, los lleva el maestro armero.

Para concluir, echénse las manos a la cabeza, la ministra se comprometió a la modificación normativa que permita la participación de la Cámara Baja en la elección de los miembros de la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios. Pues ya está la cosa liada, como en el Consejo del Poder Judicial, tribunal constitucional, de cuentas, etc, etc etc, ya está servido el mamoneo político ¿Se imaginan, unos, los de ahora, echándole la culpa a los de antes, los anteriores, de la dejadez y las nefastas decisiones tomadas en materia de seguridad? Pues si en estas cosas serias dejamos meter mano a los políticos, la fastidiamos. Ojo, ministra, se le olvidó decir una cosa, que debe ud aplicarse a sí  misma: con la seguridad, no se juega.

14 comentarios:

Anónimo dijo...

Más control político sobre la seguridad y sus consecuencias...
En el próximo accidente no nos enteraremos de nada. Como en los tiempos "gloriosos" con el accidente de Torre del Bierzo.

Anónimo dijo...

Si los inútiles de las Cortes ya entran en las comisiones profesionales, apaga y vámonos. Lo joderán todo como CSPJ, T. Cuentas, T. Supremo, etc.

Anónimo dijo...

En la empresa hay gente que tiene información de lo mal que se hacen las cosas. Tenemos unos sindicatos comprados por la empresa, unos sindicatos de una categoría profesional que no persiguen las cosas mal hechas.... Mientras no haya nadie que se lo impida, seguirán los abusos de poder. Tenemos un pueblo consentidor de todos los abusos.

Anónimo dijo...

El lugar en el que deja a Renfe, al hacerse cargo de la seguridad los burócratas de la Dirección General de Ferrocarriles, es de antología. Entre el Ministerio y los políticos, pobre seguridad en la circulación.

el Economista del Antifaz dijo...

Un inmenso error. La explotación y la seguridad en la circulación deben estar íntimamente unidas. Con éstas en el ministerio, puede arder Troya y ser el Apocalipsis, el caos.

FTF, Foro del Transporte y el Ferrocarril dijo...

Está demostrado que los ministros pierden el poco raciocinio que tienen al cumplir, como mucho, los dos años en el cargo. Algunas no lo tuvieron nunca, otro lo perdió pronto y ésta lo está perdiendo a marchas forzadas.

Con el traspaso de competencias de seguridad en la circulación, se va a abrasar.

Los diputados eligiendo a los miembros de la Comisión de accidentes, se cargarán el ferrocarril.

Tiempo, al tiempo.

Anónimo dijo...

Soy un desengañado: ni el AVE es para el bien del pueblo, ni los aeropuertos, ni muchas obras sociales.
Hay muchos intereses detrás de cada obra.
El pueblo se ha quedado sin esos servicios y sin ese dinero, que se podría dedicar a ofrecer otros buenos servicios sociales.
Los políticos se llevan un % de cada obra..., de cada compra..., para ellos o para su partido.
Incluso lo hacen los sindicatos, que no dejan de ser políticos y pagados por el Estado. ¿Qué van a denunciar? Lo denuncia los de este blog.
Luego no hay dinero para que los niños coman en los comedores de los colegios públicos.
Y así todo.
El ferrocarril es sólo una parte del iceberg.
Entre todos la mataron y ella sola se murió.
En paz descanse.

Anónimo dijo...

Cuando este sistema de seguridad, vía satelital tan de puta madre, funcione, sobraremos todos los maquinistas de estas líneas, ya los conducirá un programa de ordenador supervisado desde el un puesto de mando. Y sobrarán todos eso cargos que se jactan y ahora se lavan las manos porque no son responsables de la seguridad en la circulación. Y sobrarán todos los miembros de esos comités que no denuncian las quejas de los que ven las deficiencias y fallos.

Anónimo dijo...

Un desgraciado accidente, y ahora esto. Nadie se percata de la gravedad y el error de estas dos medidas.

Anónimo dijo...

"Tras un año durante el cual la atención ha estado en la corrupción, esperamos que los gobiernos adopten una postura más firme contra el abuso de poder. Los resultados demuestran que las sociedades continúan pagando el alto coste que supone la corrupción", afirmó en un comunicado la presidenta de TI, Huguette Labelle. Esto denota que "las instituciones públicas deben incrementar su transparencia y que los funcionarios en puestos de poder deben rendir cuentas de manera más rigurosa", afirmó TI.
En una escala del 0 (sumamente corrupto) al 100 (muy transparente), Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda lograron 90 puntos, mientras que Somalia, Corea del Norte y Afganistán apenas sumaron 8 enteros. Dentro de Europa, España se encuentra por debajo de Austria e Irlanda y por encima de Estonia y Portugal. España (65 puntos) quedó en la posición trigésima, sin apenas variaciones con respecto al estudio del año anterior.
TI reiteró que ya "ha advertido de forma consistente a Europa de que debe abordar los riesgos de corrupción en el sector público para poder superar la crisis financiera", e instó de nuevo a que se intensifiquen "los esfuerzos para blindar a las instituciones públicas frente a la corrupción".
Antonio Garrigues-Walker, miembro del comité ejecutivo de TI, ha recordado que en los últimos 18 años España ha ido bajando del puesto 21 al 30 y ha advertido de que es uno de los pocos países europeos que todavía no cuenta con una ley de transparencia en vigor. Ha lamentado también que España cuente con una sociedad civil "débil y dependiente". En su opinión, la corrupción es "una auténtica leucemia" del sistema económico y la transparencia es el instrumento para combatirla.

Anónimo dijo...

"Un desgraciado accidente, y ahora esto."
Un accidente que es imputable a la responsabilidad exclusiva y absoluta del maquinista y a su desatención. Si todo es automático, sobra el maquinista y para el único momento de atención que debe tener, no está a lo que tiene que estar... que sus defensores le justifiquen los 3000 € de sueldo y le liberen de la responsabilidad delante de la familia de las víctimas. Han querido ir sin ayudante para ganar el sueldo de maquinista y el de ayudante y ahora se quejan de que van solos...
Todo es una farsa consentida por el gobierno, porque la empresa es del Estado y los altos dirigentes son elegidos por el gobierno para enriquecerse a costa de los presupuestos generales y no de la recaudación en taquilla ¿Y luego nos sorprendemos?

Anónimo dijo...

Resulta paradójico, que el Gobierno siga postergando la privatización de empresas públicas y renacionalice una parte de Indra. Además, la Sepi, en manos de Ramón Aguirre (gracias a María Dolores de Cospedal) planteó quedarse con el 5 por ciento de Iberdrola, ante las prisas por vender del presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri.

Tras Iberia e Indra, Goirigolzarri quiere desprenderse de las participaciones industriales, porque las tiene dotadas en sus cuentas a precios irrisorios. El banco se apunta la plusvalía y evita que un cambio de rumbo del mercado trastoque sus objetivos.

Aguirre va a tener oportunidades de comprar entre las participadas de la entidad: Mapfre, NH Hoteles, Deoleo o Realia son los siguientes en la lista. La pobre gestión del tándem Ignacio Bayón-Íñigo Aldaz en la inmobiliaria de Bankia y FCC ha acelerado sus planes de venta, junto a las necesidades de liquidez del grupo constructor dirigido por Juan Béjar.

El principal elemento de inquietud internacional, que Rajoy no ha sabido solventar hasta ahora, es el de la corrupción. El juez Ruz lo eximió ayer de acudir a declarar por el caso Bárcenas, pero existe una larga ristra de imputados, entre los que se encuentran empresarios como Juan Miguel Villar Mir, José Mayor Oreja ó Luis del Rivero. El magistrado sumó ayer a esta lista al presidente de Sacyr, Manuel Manrique. Además de aumentar la transparencia a los contratos con la administración pública, es necesario incrementar las sanciones contra las empresas o los empresarios corruptos.

Mención aparte merecen los sindicatos. Se han recopilado los escándalos en que se vieron envueltos en la última década UGT y CCOO por unos 500 millones. Si los agentes sociales (patronal y sindicatos) viven de las ayudas públicas, el control sobre su gestión y sus cuentas debe ser absoluto. Es incomprensible el silencio administrativo que rodea la gestión del responsable de UGT, Cándido Méndez, después de conocerse las tropelías de su sindicato en Andalucía. Si un ciudadano que comete fraude es obligado a devolver el dinero con una sanción e inhabilitado para percibir nuevas ayudas, ¿por qué no se deja de subvencionar a UGT y se piden cuentas y el cese de Méndez, tras casi dos décadas al frente?

Anónimo dijo...

Los políticos, no saben más que meter la pata y las narices para controlarlo y joderlo todo.

Anónimo dijo...

La vida de la polis nos importa y nos afecta a todos.
Los políticos profesionales, en España, no son los mejores gestores de lo público. Si fuesen siquiera, buenos gestores de lo privado, seguro que nos iría mejor.
Los arribistas, que se aprovechan de sus cargos públicos para enriquecerse, son los que nos llevan a esta ruina, no los funcionarios de carrera, no los trabajadores de renfe, no los dueños de una empresa... Son los que desfalcan, son los que hacen uso ilegítimo de información privilegiada, el tráfico de influencias, el pucherazo, el patrocinio, y también los sobornos, las extorsiones, los fraudes, la malversación, la prevaricación, el caciquismo, el compadrazgo, la cooptación, el nepotismo y la impunidad, porque sus delitos, cuando los juzgan, ya han prescrito. Y el pueblo es cómplice, por consentidor.