Hay cosas que no se entienden. O que cuesta trabajo entenderlas. Nos referimos al nombramiento, y aceptación del puesto, del nuevo secretario de Estado de Economía José Manuel Campa. No se entiende que la ministra de Economía, ministra de un gobierno que se dice socialista -bueno, socialdemócrata- llame a un boy de Harvard, exprofesor de la Escuela de Negocios IESE, miembro que fue del servicio de estudios del Banco de España y otras prestigiosas escuelas, para hacerse cargo de una de las papeletas más peliagudas que tiene nuestro país: la economía española, anclada en una profunda crisis, al igual que las de otros muchos países. Porque, ¿cómo se come que el doctor Campa se haya posicionado por una severa flexibilización del mercado laboral hace sólo un mes, con las declaraciones, de ayer y de mucho antes, del Presidente del Gobierno? Tampoco se entiende que una persona con una formación altamente especializada y puntera en muchas materias, pero de corte neoliberal, se preste a dirigir la economía de un país bajo un gobierno que ha optado por llevar a efecto recetas neo-keynesianas, claramente alineadas con las organizaciones sindicales y la expansión del gasto y la deuda como principales instrumentos anticíclicos. Hasta ahora, hemos asistido no pocas veces al espectáculo del travestismo político por el que el gobierno asume papeles de la oposición y viceversa, pero, no a este claro ejemplo de travestismo económico. Una ministra socialista llama como su principal colaborador a un liberal y un liberal se deja seducir por una ministra socialista como principal ejecutor de una política económica keynesiana. Si el romance fuese entre las personas, la cosa se entendería y no tendría más miga. Pero no es ésa la naturaleza de este romance. ¿Acaso la ministra o el Presidente,o ambos, pretenden dar un giro a la política económica realizada hasta ahora, a la chita callando? ¿O todo es pura chamba y puro afán de apuntarse un tanto, una y otro, y que luego salga el sol por Antequera ... o Badajoz? ¿O suplir las carencias en materia de economía de la ministra con la alta especialización y preparación del nuevo secretario de Estado? La solución, a no tardar, en breve.
2 comentarios:
Vaya velocidad para llegar a conclusiones tan dramáticas.
Has leido algo suyo que te permita afirmar eso o solo lo dices porque es profesor del IESE?
No es dramatismo, estimado anónimo, -aprovecho para deciros que podéis firmar Pepe o lo que queráis, aunque sabemos que es más fácil darle al botón de anonimus- es realidad. ¿O es qué acaso te parece muy coherente el maridaje -político y técnico- entre la ministra y su 2º? He leído quizá lo mismo que tu. El manifiesto de los 100 economistas y algún que otro paper técnico. Nunca he tenido nada ni tengo contra el IESE y su profesorado, aunque desmitifico la supuesta tanta sabiduría de las escuelas de negocios y los supermanes que forman
Publicar un comentario