OJALÁ
Reproducimos el discurso de la victoria de Obama en el Grant Park de Chicago ante miles de seguidores. Una hermosa y emotiva pieza, que de cumplirse podría marcar un nuevo rumbo para USA y el resto de paises de este planeta. No son muchas las probabilidades de así sea porque muchos son los problemas y muchos los intereses de que así NO sea. Y de no ser así, quedaría al menos el sueño de lo que pudo ser. El bello sueño de que la política, tan justificadamente denostada, volviera a ser una noble tarea de servicio a los ciudadanos, a todos, pero, de especial manera, a las minorías, a los más pequeños, a los más débiles, a los marginales, a los discrepantes, a los oponentes. Esa es la grandeza de la democracia. Esa noche, como un instantáneo relámpago, democratia fulget; pareció resplandecer la democracia. Pieza también muy honrosa la de su oponente McCain que supo hacer de su derrota un gran gesto moral al reconocer, ante seguidores y contrincantes no sólo su derrota sino también los valores del ganador y mostrarle su colaboración. Raros y escasos modos políticos que no abundan por otras latitudes donde se hace del contrincante enemigo. Asumimos la ingenuidad de estas palabras, pero preferimos pecar de ingenuos antes que aceptar que, una vez más, nos invada el hedor de la política y los politicos a los que nos tienen acostumbrados. Esperamos, deseamos, queremos QUE SEA POSIBLE. Ojalá.
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