10 mayo, 2018

¿Se acaba el viento de cola?

En aviación se denomina "viento de cola" al efecto benefactor de aquellos vientos que empujan de atrás hacia delante, a favor de la marcha de la aeronave, reduciendo incluso los tiempos de viaje.

España tiene problemas económicos muy importantes. De entre todos, destacan tres: Uno, el acusado monocultivo productivo, basado en el que unos señores y señoras de fuera vengan a visitarnos, es decir, el turismo. Dos, la penuria energética de hidrocarburos, que hace que nuestra dependencia de la importación de petróleo sea total. Tres, la insuficiencia manifiesta de la producción de bienes y servicios para financiar nuestro crecimiento económico, teniendo que acudir, año tras año, a financiar el déficit con gran cantidad de deuda pública.
Hasta ahora, en estos tres problemas hemos tenido en los últimos años el viento de cola. En efecto, el turismo ha ido como un tiro hasta acercarnos en el ejercicio de 2017 a 82,2 millones de visitantes y        60.000 millones de ingresos turísticos, entre otros factores por la inestabilidad política y social de un buen puñado de países mediterráneos, tradicionalmente competidores.

La penuria energética, muy dependientes del petróleo, se ha visto mitigada por una larga racha de bajos precios del crudo, que han permitido un cierto despegue económico sin grandes sacrificios por esta causa.

Durante la crisis, el estado del bienestar y otras prestaciones sociales se han financiado con recurso al endeudamiento exterior y los préstamos y bajos tipos aplicados con que el Banco Central Europeo ha regado a buena parte de los países europeos y entre ellos España.

Pues bien, este viento de cola que ha permitido mitigar los tres problemas anteriormente citados y empezar a sacar cabeza de la crisis, se puede ir al traste. No porque lo diga yo, sino porque existen indicios que lo corroboran.

El turismo puede encontrarse, a no muy largo plazo, con el renacer de algunos países mediterráneos en sus cuotas turísticas, merced a una cierta mejora en su seguridad y conflictividad social, lo que restaría visitantes a España.

La égida de petróleo más o menos barato parece declinar y ya se están produciendo alzas significativas en el precio del crudo. No hay que descartar volver en plazo no muy dilatado a precios de tres dígitos, como antaño. La vuelta de pequeños  países productores (que venían practicando precios bajos para sacar su producción al mercado) a la disciplina de la OPEP, que controla los precios para que éstos se mantengan altos, es la razón de que la senda del precio del crudo sea cada vez más cuesta arriba.

Finalmente, parece que el BCE ha decidido empezar a cortar el grifo de dinero y de dinero barato, a los países beneficiarios durante la crisis, entre ellos España. Si el BCE nos corta el grifo del crédito y de crédito barato, vamos a tener graves problemas para financiar los abultados déficits públicos a que nos hemos acostumbrado. La única solución, apretarnos dos o tres, o más, agujeros del cinturón del gasto, lo que equivale a la vuelta a los recortes.

Esperemos que el gobierno, éste o el que sea, recorte en lo accesorio (burocracia, autonomías, gastos suntuarios, etc) y no en lo esencial, como se ha hecho hasta ahora.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues si, esperemos que este Gobierno (poco probable ya a que su capitalismo de amiguetes no se lo permitirá) o el que venga, sepa recortar en lo esencial manteniendo el sistema de bienestar. Pero, ¿Realmente es problema de dinero? Llevamos años viendo como SI hay dinero para rescatar autopistas y bancos con el dinero equivalente para pagar durante años pensiones, sanidad y educación.

Lo realmente crítico es la "Simiocracia" instalada en nuestro País desde hace algunos años, gente que no sabe gestionar ni un simple Ministerio, nuestro Presidente es el máximo exponente de los "Simios", solo hay que verle abrir la boca durante unos pocos minutos...Gente que aun, y despues de tantas décadas solo sabe gobernar a base de cacicadas y según vengan los titulares, ayudados por un ejercito de asesores (muchas veces familiares) que cobran mas que el propio Presidente.

Tanto que esta camada de "Liberales" de pacotilla se las da de entendidos de la economía...Hace unas pocas semanas Rajoy y Rivera elogiaban al gobierno Argentino por su deriva macroeconómica, y ayer, tuvieron que pedir otro rescate al FMI. Pero aqui en nuestro interior, volver a los barruntos de burbujas inmobiliarias, justo lo que acabó por meternos en la crisis de 2008. Los que están, no son los que nos sacarán a flote, desde luego, no saben gestionar nuestros dineros, o si, pero no para nuestro beneficio.

En definitiva, hace falta un Gobierno que elimine todas esas corruptelas y mamandurrias que destruyen un Pais desde dentro, primero hay que limpiar el Gobierno para poder empezar a limpiar al País.

PD: A FTF se le olvida mencionar el empleo. El cual parece subir, pero no es más que un espejismo de personas que abandonan el mercado laboral bien por desaparecer de las listas y dejar de contarse o por entrar en edad de jubilación. Empleo en el cual solo 1 de cada 10 son empleos indefinidos y de calidad. Todo un drama.

Emilio dijo...

Si señor, totalmente de acuerdo. Dependemos hasta límites nada saludables de factores que nos vienen dados. Desgraciadamente, los que nos gobiernan no pasan del manido "hay que cambiar el modelo productivo" como si por mucho repetirlo fuera a cambiar algo.
En un país con un nivel muy alto de universitarios, resulta que el 90% o más del empleo, es poco o nada cualificado. Un despropósito que solo conduce a la frustración.

Me gustaría que como economista, aparte del sabio y viejo consejo de no gastar lo que no se tiene, nos dieras tu punto de vista sobre cómo carajo empezamos a cambiarlo de verdad, para que nuestro biznietos no tengan un país que pilla neumonía cuando los demás se resfrían.

Echo la vista atrás y me entra de todo. Éramos una potencia en astilleros y se han ido al garete. Éramos una potencia pesquera, y por a o por b, casi no quedan barcos. Teníamos una industria siderúrgica y no queda ni rastro.


Anónimo dijo...

Meteorológicamente el viento de cola es algo que depende de muchos factores, entre otros, la dirección del viento y la dirección de marcha del avión. Si el viento da de cara, no resulta beneficioso. La llegada de turistas también depende de múltiples circunstancias, si otros países de nuestra latitud y proximidades deciden favorecer el turismo, el viento nos da de cara, porque aquí echamos a los turistas desde algunas instituciones políticas. Los hoteles y restaurantes viven de los turistas, también los pisos de alquiler. Faltan infraestructuras para atender adecuadamente a quien nos llena la caja registradora. Algunos turistas delincuentes mejor que no vengan. El combustible que no tenemos, es caro, pero el sol, del que disponemos en abundancia, es gratis y nuestra política energética es favorecedora de las empresas eléctricas y disuaden del uso de los paneles solares, para que todos paguemos a la Red Eléctrica Española, con sus distintas empresas, de la que viven muchos ex-cargos políticos.
Los políticos viven de los impuestos de los ciudadanos, el petroleo tiene su impuesto y el gas y la electricidad y la hostelería. Cuanto más se recaude, mejor para el político, peor para los ciudadanos y para los empresarios (algunos se van a pique aunque algunos se enriquezcan) y ya también para los trabajadores por cuenta ajena.
Tenemos un parlamento en cada autonomía y un ayuntamiento con concejales en cada pueblo (en algunos pueblos pequeños alcaldes y concejales no cobran) y todos viven de la recaudación de impuestos, de las herencias.
Hay ciertos personajes que se permiten defraudar a hacienda y hacienda no les cobra lo que les corresponde pagar. El gobierno se lo permite a ellos. A otros les permite robar el dinero público a manos llenas y no se les exige devolver lo robado.
Las manifestaciones más multitudinarias en estos días son las protestas contra la sentencia de la manada y a favor de la mujer que sufrió abusos ¿violación? en San Fermín. Afortunadamente no se han producido más casos de abusos, de violaciones y muertes por temas sexuales. Algunos jubilados también salen a reivindicar su pensión 'justa'.
Hay que cambiar muchas leyes, pero el estatismo le va bien a los políticos. Por eso lo primero que hay que cambiar es el sistema de elección de políticos, es el reparto de escaños, es la prohibición de las puertas giratorias.

Anónimo dijo...

De culo, cuesta arriba y sin frenos. Rajoy nos lleva así. Con ZP las cosas no iban mejor. La prima de riesgo con ZP estaba descontrolada en valores máximos. Rajoy no tiene escrúpulos y para mantenerse en el cargo no le importa dar a los independentistas Cataluña, Baleares, Valencia, como los otros tienen las Vascongadas, llamadas ahora 'país vasco', para así tener 'país catalá', 'país balear', 'país galego', país aragonés', 'país andalú'... Rajoy traiciona España y a los españoles. Una muestra: Rajoy ha hecho el ... con la aplicación del 155 y todavía podemos por parte de algunos catalanes 'España nos roba' Que estos catalanes les pidan cuentas a los Pujol. Y por otro lado el mayor asesino de ETA se convertirá en alcalde de algún pueblo vasco. Ahora podemos seguir votando como siempre, a los de siempre. Aunque tampoco hay alternativa: tan malo es el uno, como el otro y los que no tienen experiencia...

Anónimo dijo...

El desastre político, económico y social causado por el nefasto robo de la democracia primero, imponiéndonos una monarquía oligárquica de partidos sin separación de poderes y el expolio de nuestra riqueza después, repartiéndose España como si fuera un solar, a cuyo fin la dividieron nuestros políticos en 17 reinos de taifas contrarios a nuestra realidad geográfica e histórica, a los que dotaron de todas las instituciones y organismos propios de naciones soberanas, para enchufar a cientos de miles de amigos. Estos funcionan con una autonomía frente al Estado superior a la que tiene España frente a la UE, y hasta han destruido la unidad de mercado. No existe ninguna otro nación con mayor descentralización del gasto – el doble de un estado federal - y a la vez con menor control, un despilfarro anual de 100.000 millones de euros. Como consecuencia, España ha experimentado el mayor retroceso político, económico y social respecto a los países de nuestro entorno de todo el mundo desarrollado.

Adicionalmente, se impuso un sistema electoral que favorece escandalosamente a los nacionalistas - sus votos valen cinco veces lo que los no nacionalistas- lo que les ha permitido convertirse en árbitros de la formación de gobiernos y chantajearlos sin contemplaciones, para obtener concesiones inauditas en dinero y en soberanía que han llevado, entre otras cosas, a un régimen fiscal en el País Vasco que les permite el expolio de 12/13.000 millones de euros anuales al resto de España y en Cataluña la negligencia de Rajoy ha fortalecido el sentimiento independentista, que dará paso a una situación de preguerra civil que como es imposible se convertirá en la destrucción de la convivencia . Nunca se había llegado a ese extremo de odio y de incompatibilidad para la convivencia en una región española.

Del desastre político son ya conscientes la mayoría de españoles, del económico muy pocos entienden la gravedad y la profundidad de nuestro retroceso respecto a los países de nuestro entorno. Y menos aún el desastre que se cierne sobre las generaciones futuras, donde por primera vez en siglos los hijos viven peor que los padres, y donde la gigantesca burbuja de deuda ya imposible de devolver arruinará la vida de los españoles durante los próximos 50 años. Hoy gracias al espectacular desarrollo de la tecnología hay más de todo que en 1975 tanto en España como en el último país del planeta, dando la sensación que en economía las cosas van bien cuando la realidad es justo la contraria. El desguace de varias centrales nucleares casi terminadas, que producirían hoy electricidad a la décima parte del coste de las renovables, lo que nos lleva a pagar la electricidad más cara de Europa cuando teníamos la más barata.

En palabras del mejor pensador político español, D. Antonio García Trevijano: “El futuro de España es absolutamente incierto, porque la tendencia que prospera entre los españoles es la dejadez mental y moral ante los desastres nacionales, y cualquier vaticinio requiere una lógica que no puede contemplar las consecuencias de la actual disolución del carácter y de la moralidad nacionales, es decir, de la inteligencia y de la voluntad colectivas. Puede pasar cualquier cosa, porque tenemos un monarca y una clase política cobardes, que serían incapaces de emplear a la jurisdicción militar como prevé el Art. 116 de la Constitución si el Supremo no se atreve a aplicar la Ley como se haría en cualquier Estado de Derecho, ya no queda ni valor para eso”.

Anónimo dijo...

Si nos empieza a faltar el viento en cola, tan favorecedor para todas las travesías, en tierra y más concretamente en el ferrocarril, la falta de un viento favorable igual paraliza todo el transporte y a la vez se duplican los puestos de directivos que organicen cómo deben circular los trenes, si los AVE's deben ir pintados de verde con pintura alquídica, o pintura acrílica, pero no estudiarán cómo conseguir que el transporte ferroviario haga unos mejores servicios, más racionales, más centrados en aumentar los aforos con menores gastos públicos. Se reduciría el número de accidentes, la contaminación, el número de transportes pesados en nuestras carreteras. Pero no: hay que vender coches, hay que vender combustible, hay que aumentar las flotas de camiones, hay que cobrar por aparcar, hay que cobrar por circular y de todos estos cobros viven muchos políticos, que sin tener intereses directos en empresas de energía, cobran ya por estar en su despacho por cada litro vendido, por cada kw consumido, por cada impuesto de matriculación y de circulación, por cada carretera que se hace nueva o se repara. Ser político es la mejor elección profesional y si no, tener un amigo, un cuñado, un suegro, un cónyuge en una empresa pública como Adif o Renfe. Si no tienes ni lo uno ni lo otro, te vas de España a trabajar como médico, como ingeniero, como arquitecto, como profesor, como investigador, y en España les damos el 'welcome' a los inmigrantes, refugiados o no, ilegales o no, que en el fondo son estómagos agradecidos que darán el voto a quienes les favorecen estar mejor que en el país de origen. Luego no hay dinero para pensiones, porque el gobierno se lo gasta en otras cosas. Con el viento...

Anónimo dijo...

Eso será el día en que los inmigrantes y refugiados puedan votar....la demagogia de siempre