18 febrero, 2022

España, la cigarra de Europa: no crecemos (*) y seguimos viviendo de prestado

 No hemos encontrado un mejor símil al que asociar la situación económica por la que atraviesa España de bastante tiempo acá que la fábula de "La hormiga y la cigarra" que todos hemos leído en los colegios de nuestra infancia. Laboriosa la hormiga para atesorar comida para el invierno y vaga la cigarra que mientras sesteaba, dedicaba su tiempo en solaces vacuidades.


Sustituyan ustedes "comida" por "PIB" y "vacuidades" por "despilfarro" y tendrán la ecuación perfecta de nuestros males económicos, sin tener que ir a ninguna facultad de economía a que se lo expliquen.

A España, como no crece, no le queda otra que vivir de prestado, circunstancia en la que ya llevamos años y años, gobiernos rojos, gobiernos azules o mediopensionistas en una pendiente suicida que puede levarnos a la quiebra internacional, el llamado "default", con consecuencias desastrosas para las generaciones actuales y futuras por muchos años.


Fue ayer o anteayer cuando la ministra de economía Nadia Calviño presumía de la fortaleza de España en la recuperación y en la creación de empleo, que según ella, su jefe y la "colegui" Montero de Hacienda, va como un tiro y del crecimiento ya ni les contamos.

Bien, pues en éstas vienen las estadísticas de a UE que les arrea una bofetada en todos los morros con unos datos como los que pone de manifiesto el gráfico de la izquierda.

Estos datos representan la evolución del PIB de los países europeos (no solo los de la zona euro, sino de la casi totalidad de Europa) entre 2019 y 2022, es decir en plena epidemia, en variación acumulada.
España está a la cola y es el único país de  26 países europeos que todavía arrastra números rojos.

Al margen de Irlanda que ha mostrado el mayor crecimiento con un 27% desde que se convirtiera en un paraíso para financieros e inversores por su laxitud fiscal y Luxemburgo de similares características, los que ocupan los 5 primeros valores en la tabla corresponden a países que antaño estaban bajo la dictadura soviética.

Por el contrario, los países tradicionalmente más desarrollados como Francia, Alemania e Italia figuran en los últimos lugares, con crecimientos imferiores al crecimiento medio de la UE (3,1%) y la eurozona (2,5%).

Consecuencia de nuestra destrucción de riqueza, como no puede ser de otra manera,  (expresión  manida por nuestros políticos hasta la saciedad y cursi donde las haya) hemos sido en el bienio los lideres en crecimiento de la deuda pública con un 26,3% para intentar tapar el enorme despilfarro y corrupción que preside nuestra vida pública, en una huida hacia adelante, para que el siguiente arree con el desastre cada vez más ingobernable. Mientras, la media de crecimiento de la UE fue casi un 13%, la mitad que el nuestro.

En una carrera ya sin retorno, nos hemos jugado lo que se ha dado en llamar el "estado del bienestar" que fundamentalmente son nuestro sistema de pensiones y de sanidad, para que unos partidos corrompidos hasta los tuétanos se dedicasen  -se siguen dedicando-   a comprar votos, hacer clientelas y despilfarrar a manos llenas.

A no mucho tardar, tanto si siguen gobiernos criminales como el que soportamos, como si viniese un gobierno con dos dedos de frente, veremos reducirse nuestras pensiones, tanto más cuanto más altas sean éstas, así como nuestras prestaciones sanitarias y farmacéuticas, empezando por nuevos copagos en ambas.

El gobierno del comisionista de Venezuela, un tal Rodríguez, inauguró la era de destrucción económica, política y social de España, seguida de una etapa a cargo del inane y cobarde Rajoy que mantuvo intactos los cimientos del edificio ideológico que actualmente se encarga de rematar el mentiroso, traidor y falsificador que nos desgobierna, mamporrero de las directrices que recibe del globalismo internacional para desmembrar y pauperizar nuestra nación.
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(*)  Algunos pueden pensar que como dice el gobierno y la ministra, crecemos. Sí, claro la mitad de lo que dijo en un principio, pero menos de la mitad de lo que perdimos  -nada menos que un -11,8%-  en 2020. Es decir, que respecto de 2019 hemos destruido riqueza. Que nadie se engañe.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Un panorama aterrador el que nos están dejando los últimos gobiernos de esta curtida piel de toro. Cada gobierno que sucede es peor que el anterior. Desde la 'plantá' en la Puerta del Sol, la recesión ha sido en caída libre. La prima de riesgo se disparó junto con el rescate a la Banca y el consecuente 'apriete de los cinturones'. Rajoy no fue mejor que Zapatero y Sánchez no es mejor que Rajoy. Y Casado... está arrastrando al PP a la hecatombe, con el empoderamiento de Teo: ni uno ni otro están cualificados para gestionar un partido y mucho menos para presidir el Gobierno de una nación como España. Mucha culpa tienen también todos esos fanáticos de un partido político, como los de un equipo de futbol (viva er Beti, manque pierda) que hacen real eso de 'sarna con gusto...' Y así estamos entre unos políticos felones y una plebe con la mente abducida por los de un partido y por los de otro. Parece que si son los nuestros los que nos llevan a la ruina, nos duele menos y no protestamos, no hacemos huelgas generales, no tomamos la calle, no incendiamos las ciudades y nos comportamos como un rebaño de auténticos borregos camino del matadero. Como ciudadanos somos responsables de lo que sufrimos con sarna. Y con estos políticos. Los cubanos no viven mejor, ni los venezolanos, ni los coreanos de la República Popular Democrática de Corea (RPDC). Yo no quiero sus condiciones de vida, quiero una calidad de vida mejor: quiero una seguridad ciudadana garantizada, un sistema de salud pública más eficiente, que para eso pagamos la S.S., quiero una educación estatal que favorezca la convivencia y no fomente el odio... y para esto NO hay que dejarles hacer sus tejemanejes corruptos a políticos sin escrúpulos.

Anónimo dijo...

Después de los años que lleva Sánchez con su totalitarismo, no es de sorprender su gestión económica, ni su gestión estratégica, ni su gestión social, ni su gestión autonómica, ni su gestión... Independientemente de lo que nos digan algunos medios de comunicación, España va mal, pero no importa porque a los lameculos del gobierno les va bien, les inyecta dinero (se llame subvención u otra cosa) y les mantiene comprados para que cuenten sólo la verdad que dicta el gobierno. Hay que saber cómo se sienten los empresarios, los parados, los que tienen un empleo en condiciones precarias, los que cobran una pensión, los que no la cobran adecuada a su dependencia, los que no cobran las ayudas de Europa en un reparto equitativo... y aún así el Psoe tiene un montón de votantes que soportan los impuestos con alegre resignación y capean otras carencias con esperanzada ilusión. Si no lo remediamos pronto, de aquí a nada, todos sin propiedades, todas las empresas nacionalizadas y todos felicísimos en un estado comunista. Así, como no pongamos una alternancia a este gobierno.