23 noviembre, 2020

Las inversiones de los PGE para 2021 discriminan al eurocorredor Atlántico y en especial a Galicia

Dicho de forma resumida, "el Corredor Atlántico, en el que se integra Galicia, es un corredor ferroviario de pasajeros y mercancías que conecta los puertos de la fachada atlántica con el interior y el resto de Europa. Pertenece a la red básica de la Red Transeuropea de Transporte (TEN-T) que debe estar finalizado antes del año 2031. Junto con el Corredor Central y el Corredor Mediterráneo serán las tres principales redes de transporte tanto de personas como de mercancías de la península ibérica con el resto del continente europeo".

Pues bien, en el primer proyecto europeo Galicia y Asturias quedaban excluidas del eje luso Lisboa-Estrasburgo, marginando nuestra fachada y eje atlántico y solo a última hora el noroeste peninsular logró ser aceptado entre los principales corredores ferroviarios europeos de mercancías y viajeros.

Hasta 2018, Galicia no fue incluida en la Red Básica Transeuropea, lo que le impedía optar a las ayudas del Fondo Conectar Europa, aunque ya estaba conectada con el corredor Atlántico por una línea decimonónica. La inclusión de Galicia debe permitir en el futuro conectar las mercancías gallegas a través de una infraestructura ferroviaria moderna con los principales centros logísticos , así como los puertos de Vigo y La Coruña con Europa.

Pero, no sólo costó Dios y ayuda que Galicia y Asturias fuesen incluidas en este selecto club ferroviario europeo, sino que la postergación continúa, ahora no ya por Bruselas, sino también por el gobierno español, como refleja el borrador de los PGE (Presupuestos Generales del Estado) para el año 2021.

De nuevo, como ya ocurrió con el AVE gallego, existen dos velocidades a la hora de llevar a cabo los proyectos ferroviarios, que casi siempre suelen postergar a la región gallega. La guinda de las inversiones en los eurocorredores, se la lleva en este caso el corredor del Mediterráneo que conectará Algeciras y Budapest. Ya lo venía advirtiendo la Plataforma que agrupa a las organizaciones empresariales de las tres comunidades autónomas por las que atraviesa esta red: Galicia, Asturias y Castilla-León.

El proyecto de presupuestos de 2021 destina al corredor del Mediterráneo casi 2.000 millones de euros, de los que más de 800 millones se destinan a obras en Andalucía para el AVE en el tramo Almería y Murcia como principal inversión. Así mismo 500 millones de euros van a parar a Cataluña y la Comunidad Valencia que reciben casi 500 millones cada una, con el AVE entre València y Tarragona como principal actuación.

Por el contrario, el corredor Atlántico (Lisboa-Estrasburgo) recibe 1.200 millones, 800 menos que el eje Mediterráneo, de los cuales se llevan la mayor tajada los proyectos de la Y vasca, junto con el tren de alta velocidad a Extremadura, que se llevan más de la mitad entre ambos. Para las tres regiones noroccidentales quedan solamente 460 millones a repartir entre Galicia, Asturias y Castilla-León. De nuevo, una vez más, las cenicientas en materia ferroviaria.

De los 460 millones a repartir entre la tres comunidades citadas, la nueva pero eterna variante de Pajares que es un sumidero de millones, se lleva 179 (63 millones para la parte asturiana y 116 para la leonesa).  Lo que es para Galicia, solamente se han presupuestado 66 millones para el Eje Atlántico La Coruña-Santiago-Vigo y la renovación de la línea Orense-Monforte-Lugo, en este último proyecto casi exclusivamente para electrificación de la línea, lo que nos da una idea del retraso en que se encuentra todavía buena parte de la infraestructura convencional ferroviaria gallega, más próxima al siglo XIX que al XXI.

Todos los gobiernos del signo que sean, han ido posponiendo año tras año la finalización de las obras del AVE gallego desde hace aproximadamente 20 años, engañando sucesivamente a los gallegos y sus electores. La última promesa del ministro de turno la ha fijado para mediados del próximo año y veremos a ver si no se trata de una promesa más de las infinitas incumplidas que se han hecho a la sociedad gallega. Todo presagia que lo mismo puede ocurrir con la parte gallega del eurocorredor Atlántico, que es una infraestructura estratégica para la salida de las mercancías gallegas hacia Europa. Esperemos que esta vez se rompa este pronóstico.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Malestar entre los empresarios de la comarca con el coordinador del Corredor Mediterráneo: Josep Vicent Boira atribuye el despliegue del tren al empuje y la presión que ejerce el sector privado frente a la iniciativa del Estado.
Boira ha publicado un tuit en las últimas horas en el que dice que la aportación de entidades privadas como la plataforma empresarial Corredor Mediterráneo supone una diferencia "sustancial" para la ejecución de las obras. El coordinador se manifestaba así ante un recorte de prensa en el que el secretario general del PSOE de Galicia, Gonzalo Caballero, (sobrino de Abel Caballero) echaba en falta un empresariado implicado en su región con el desarrollo del Corredor Atlántico al igual que sucede con los valencianos y el trazado del ramal litoral del Mediterráneo.
La Cámara de Comercio recuerda que la inversión privada llega al fomentarse las infraestructuras y la CEC valora que hay la misma unión entre los empresarios que pueda existir en Valencia.
(Informa EuropaSur)

Anónimo dijo...

Mientras, Bildu exige al PSOE que el tren de alta velocidad no pase por sus zonas de influencia.
La segunda oleada del covid-19 hunde la demanda de pasajeros de Renfe un 80%. Ni campaña de Navidad, ni Black Friday: Renfe mantiene el desplome de su demanda por encima del 80%.